¿Qué hacer si tengo bolitas blancas en la garganta?
Las bolitas blancas en la garganta se denominan caseum o tonsilolitos. Son unos puntos amarillentos, que causan muchas molestias y tienen un olor muy desagradable. Son una de las causas de la halitosis, o mal aliento, y aparecen en las amígdalas.
Se forman por la degradación de epitelio exfoliado, fragmentos de queratina, restos de alimentos y la mucosidad causada por las bacterias presentes en la cavidad bucal. Todo este conjunto de “desechos” se depositan en las criptas de las amígdalas y dan el olor característico de putrefacción.
Cerca del 10% de la población padece de mal aliento causado por estas bolitas blancas, estando en cuarto lugar entre los causantes de la halitosis. Las personas que padecen de estas bolitas blancas en su garganta, además de las molestias que causan, tienen la sensación de tener un cuerpo extraño en la boca y un sabor muy desagradable, que provoca en ellas, un problema a nivel psicológico.
Los problemas que causa el caseum en las personas son de preocupación, ansiedad y tensión por su mal aliento, lo que provoca que se vuelvan susceptibles, vergonzosas y permanecer calladas la mayor parte del tiempo.
Síntomas que anuncian el problema
Además de las molestias por tener los puntos blancos en la garganta ya descritos, se suelen asociar además algunos síntomas como:
- Congestión nasal
- Dificultad para tragar y dolor al hacerlo
- Sequedad en la garganta
- Sabor muy desagradable en la boca y mal aliento
- Inflamación en las amígdalas
Características generales
No se trata de una enfermedad que presente algún peligro para el organismo, pero es causante de muchas molestias por la aparición de pequeños cálculos en las amígdalas.
Esto puede causar dolor en el momento de tragar, y también molestias al respirar por el constante mal sabor en la boca.
En ciertas ocasiones las personas que tienen este padecimiento, se percatan de su existencia por la advertencia de familiares o amigos debido a su mal aliento, lo que provoca trastornos psicológicos.
Una vez que aparecen estas bolitas blancas en la garganta, se van solidificando más, volviéndose cada vez más molestas. Algunas veces, las gárgaras de agua con sal puede ayudar con las molestias, pero la consulta a un otorrinolaringólogo es de esencial importancia.
El otorrinolaringólogo evaluará si las bolitas blancas en la garganta no se deben a una enfermedad más grave que las esté generando como pueden ser:
Faringitis:
En la que es común que aparezcan manchas blancas en la garganta, aunque no tan definidas como los puntos blancos. Generalmente, esta enfermedad causa congestión, fiebre y dolor, debido una infección vírica o bacteriana. Esta se cura por medio de antibióticos para la infección, y analgésicos para el dolor.
Amigdalitis:
Es la inflamación de las amígdalas, y puede ser causada por virus o bacterias, por lo que el tratamiento lo determinará el especialista de acuerdo a su criterio. Sus síntomas coinciden con la aparición de puntos blancos en la garganta, además de dolor de cabeza, rigidez en el cuello, dolor en la garganta y fiebre.
Angina estreptocócica:
Provocan que las amígdalas se cubran de manchas blancas, que son la causa de mucho dolor, debilidad, y fiebre.
Aftas orales o candidiasis orofaríngea:
Se produce por un crecimiento excesivo de bacterias, lo que suele causar la aparición de manchas blancas en la garganta, y muy mal sabor en la boca.
Tratamiento apropiado
El especialista recetará medicamentos adecuados para eliminar los puntos blancos de la garganta, y también recomendará una buena higiene bucal, y gárgaras después de cada comida, con algún enjuague bucal de los que se consiguen en las farmacias.
Cuando los medicamentos no brindan ningún beneficio, la solución es una intervención quirúrgica llamada amigdalectomía, que consiste en la extirpación de ambas amígdalas.
Otro de los procedimientos, es extirpar los cálculos mediante láser, método que permite no extirpar las amígdalas, es indoloro y no requiere internación.
